jueves, 29 de mayo de 2014

EL NACIMIENTO DE ALBERTO

Hola amigas!!!
Comparto con vosotras este nuevo relato de una Mamá Luna, en el que Isabel nos cuenta como vivió el nacimiento de su hijo Alberto.
Espero que os guste tanto como a mí, y que, sobre todo a las que os queda poquito para tener a vuestro bebé, os ayude a tener más confianza y tranquilidad.
Para las que no lo sepáis, cuando Isabel se refiere a "olas uterinas" está hablando de las contracciones del parto.
Quedaos con estas palabras: TODO VA A IR BIEN.
Gracias Isabel por tu generosidad.
Consuelo. Centre Lluna
https://www.centrelluna.com/


"... Antes de contaros mi experiencia debo decir que nada fue como imaginé, pero todo fue perfecto. Para empezar, no tuve el factor sorpresa de ponerme de parto ya que éste fue provocado a las 41 semana + 1 día y acudimos un domingo a las 8:30 al hospital.

Una vez llegamos me pusieron medicación vía vaginal para madurar el cuello del útero y nos dijeron que fuésemos a la habitación a esperar que me hiciese efecto.

Ya en la habitación, acompañada de mi pareja, puse en marcha todo lo practicado en las clases de Consu: movimientos con la pelota, andar con los talones hacia fuera , respiraciones, glotis abierta y por supuesto el anclaje y repitiéndome “todo va a ir bien”.

Sobre las 14:30 noté alguna ola uterina muy suave y se fueron intensificando hasta las 21:00 que me dijeron que ya había dilatado 4 cm y estaba de parto (me quede muy sorprendida ya que la intensidad de las olas uterinas no era tan fuerte como creía que seria) y tan solo media hora mas tarde ya había dilatado a 10 cm. Estaba muy tranquila, acompañada de mi pareja que fue una gran ayuda en todo momento. Me rompieron la bolsa y a partir de ahí todo fue muy rápido, solo notaba la sensación de querer empujar y tras adoptar diferentes posturas (sentada en el borde de la cama, a cuatro patas sobre la cama y tumbada de lado con una pierna levantada) llegó la cabeza de Alberto y la matrona me aconsejo hacer episotomía debido al tamaño del bebé (4,440 kg) y en ese momento acepte, aunque ahora se que igual hubiese ido bien. A las 23:20 llegaba al mundo en perfecto estado y sin haber necesitado epidural.

Debo decir que una vez nació Alberto la sensación de alegría de verlo sano y oírlo llorar, notar su calor sobre mi pecho desnudo, la cara de emoción y orgullo del padre y la satisfacción personal de haber logrado traer al mundo un ser humano tan perfecto hace que se olvide todo el cansancio de ese día, de hecho saliendo por la puerta del paritorio mis palabras a mi pareja fueron “ha sido tan bonito que tendría otro ya mismo”.

Para terminar me gustaría decir a las futuras mamas que personalmente me ayudo mucho hablar con mi pareja de cómo afrontaríamos ese día y que lo mas importante era apoyarme, no decir nada negativo y la respuesta a todo debía ser “si cariño” para que la oxitocina fluyese libremente por mi cuerpo.

También considero de gran ayuda el masaje perineal que lo estuve practicando todos los días desde la semana 30 durante 5 minutos.

Y sobre todo deciros que somos mujeres poderosas, sabemos parir y nuestros bebes están preparados para nacer y por todo esto “TODO OS VA A IR BIEN “tranquilas y vivid ese día con ilusión, ya que es el día en que por fin conoceréis a vuestro hijo..."

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.